Castillo de San Esteban

Introducción

Santisteban del Puerto, un enclave histórico situado en la provincia de Jaén, se erige majestuosamente entre la margen izquierda del río Guadalimar y los límites meridionales de la Meseta.

Esta región se caracteriza por su topografía suavemente ondulada y una rica diversidad de ecosistemas que han desempeñado un papel fundamental en la historia de la fortificación en la zona.

En el centro de este paisaje singular se encuentra el Castillo de Santisteban del Puerto, cuya estratégica ubicación en una colina aplanada lo convierte en un testimonio tangible del pasado medieval de la región.

Con una altura de 820 metros y un perímetro amurallado casi rectangular de unos doscientos metros de diámetro, este castillo ha sido testigo de siglos de historia y es un punto de referencia destacado en la zona.

Lo más notable de esta fortaleza es su sistema defensivo, que se extendía más allá de sus murallas para abarcar parte de la población circundante.

Además, el Castillo de Santisteban del Puerto estaba conectado estratégicamente con otros castillos cercanos, como los de Vilches, Torre Alver, Iznatoraf y Chiclana, formando una red de defensa crucial en la región.

En este artículo, exploraremos en detalle la historia y arquitectura de este impresionante castillo, así como su importancia en la historia de Santisteban del Puerto y la provincia de Jaén.

Datos Históricos

El Castillo de Santisteban del Puerto tiene una rica historia que se remonta a tiempos antiguos, y su evolución a lo largo de los siglos ha dejado una huella indeleble en la provincia de Jaén.

En esta sección, exploraremos los eventos históricos clave que han dado forma a este emblemático sitio.

Orígenes Ibéricos y Romanización: Como es típico en la región del Alto Guadalquivir, los primeros vestigios de Santisteban del Puerto se remontan a un antiguo poblado ibérico. En la época del emperador Adriano, este asentamiento era conocido como "Ilugo" y se encontraba cerca de la ubicación actual de la población. La romanización, que marcó una era de esplendor en la región, reemplazó el nombre original por "San Esteban" durante la etapa visigótica.

Época Musulmana y Luchas Estratégicas: Durante el período musulmán, el municipio adoptó el nombre "Sant Estiban" y se convirtió en la cabecera de un distrito, según las crónicas árabes.    

Debido a su posición estratégica como un punto de paso hacia Toledo y su ubicación en las importantes rutas romanas, Santisteban del Puerto fue escenario de numerosos conflictos y luchas entre los Banu Habil y el poder central omeya.

Asedios y Transformaciones Defensivas: En el año 914, el castillo de Santisteban fue ocupado por los hermanos Banu Habil, y uno de ellos, Habil, llegó a un acuerdo con Abd al-Rahman, emir de Córdoba, para mantener el control de la fortaleza a cambio de su lealtad y participación en las expediciones del emir.

En 924, Abd al-Rahman III lanzó un asedio que duró 25 días y finalmente recuperó el castillo para los omeyas. A medida que el Califato de Córdoba se desmoronaba, el sistema defensivo del castillo se volvió más complejo y eficaz, con la construcción de murallas de argamasa, mejoras en la infraestructura y la edificación de una fuerte alcazaba en la cumbre del cerro.

Conquista por Fernando III el Santo:  En 1225, el castillo de Santisteban fue sitiado por Fernando III el Santo, y en 1226, los musulmanes se rindieron, entregando la fortaleza a cambio de una suma de dinero y bienes.

Esta conquistaestratégica aseguró importantes rutas hacia Úbeda y Baeza, rompiendo el cordón umbilical que unía las conquistas andaluzas de Castilla.

Cambio de Dominio y Restauración: A lo largo de los años, el castillo cambió de manos en varias ocasiones, pasando de ser tierra de realengo a ser otorgado a la Orden de Calatrava en 1300. Sin embargo, en 1285, recuperó su estatus de villazgo de realengo.

Estos cambios de dominio reflejan la importancia estratégica de Santisteban en la región.

Bien de Interés Cultural: En el año 1985, el Castillo de Santisteban del Puerto fue declarado Bien de Interés Cultural, un reconocimiento a su significativa contribución a la historia y el patrimonio cultural de la provincia de Jaén.

El castillo

En esta sección, examinaremos en detalle la estructura y la evolución del Castillo de Santisteban del Puerto, una joya arquitectónica que ha desempeñado un papel fundamental en la historia de la provincia de Jaén.

El origen del castillo se remonta a tiempos antiguos, cuando en los alrededores del escarpe de la meseta se establecieron sucesivamente un oppidum (asentamiento ibérico) y, posteriormente, un castillo de época altomedieval.

Durante los siglos XI y XII, los bereberes, que habían tomado control de la región, erigieron una imponente fortaleza de calicanto que dominaba la cima del cerro. La construcción de esta fortificación implicó la excavación parcial del borde del escarpe y la posterior nivelación del espacio interior, contribuyendo así a la transformación de la meseta natural.

En el siglo XIII, tras la reconquista cristiana de la zona, se llevaron a cabo importantes ampliaciones en el castillo. En su recinto, se podía acomodar cómodamente a más de dos mil personas, lo que habla de su relevancia estratégica y su capacidad defensiva.

El castillo presentaba unas dimensiones impresionantes, con unas medidas de 62 por 140 metros.

El castillo contaba con una serie de torreones, algunos de ellos macizos y otros huecos, que complementaban su sistema defensivo. Actualmente, solo se conserva un torreón, que tenía la función principal de proteger y vigilar el acceso al castillo.

Este torreón tiene una planta rectangular y sus dimensiones son de 6,10 por 5,30 metros. La entrada a la torre se realizaba a través de una puerta coronada por un arco apuntado, y en una de las jambas de la entrada, cerca del suelo, se encuentra un mampuesto con una cruz potenzada toscamente labrada. El interior de la torre estaba cubierto por una bóveda de medio cañón apuntada.

Además del propio castillo, se construyeron murallas adicionales en 1337, de las cuales aún se pueden apreciar vestigios en la localidad.

En el lado norte, se pueden observar restos de una muralla que descendía por la ladera hasta un pequeño cerro llamado La Torrecilla, donde existía un torreón que desapareció con el tiempo y que cerraba la población por el oeste. También es digna de mención una torre albarrana rectangular, que en la actualidad funciona como el campanario de la iglesia de Santa María.

Una característica notable del Castillo de Santisteban del Puerto es el sistema de comunicación que los habitantes utilizaban para conectarse con el pueblo. Se empleaban minas que partían desde el centro de la meseta y se extendían a lo largo de unos setecientos metros.

El pasado ibero-romano de este lugar ha dejado tras de sí una gran cantidad de restos arqueológicos, incluyendo exvotos íberos de bronce y barro, cuentas de collar policromadas, cerámicas pre-romanas y romanas, así como monedas de épocas antiguas.

Estos hallazgos arqueológicos dan testimonio de la larga y fascinante historia de Santisteban del Puerto y su castillo.

Acceso

Las ruinas del castillo de San Esteban son visitables de manera libre.

Fotos del Castillo de San Esteban